¿Qué es una Grafocata? Descubre tu vino con tu letra
Ana Ortiz nos presenta una experiencia única en el mundo, que consiste en descubrir qué vino, bebida o producto gastronómico marida con tu personalidad, a través del estudio grafopsicológico de tu letra.
Seguro que conoces el potencial de la Grafología en otros campos, como los recursos humanos, la investigación judicial, histórica y forense. Pero yo he querido acercarte un poco más al mundo de los sentidos- de los tuyos, de los sabores, aromas y colores que reflejan tu manera de ser.
Así que una Grafocata está creada para personas singulares que desean ir un paso más allá en el mundo del maridaje enológico y gastronómico. Personas que desean saber por qué eligen un determinado vino, bebida o cualquier otro producto que se pueda degustar y en el que intervengan los sentidos. Siempre, a partir de su propio autoconocimiento.
¿Es posible entonces que la Grafología nos ayude a conectar con nuestro lado más emocional? Sí. Te explico por qué. La letra es el reflejo del cerebro porque es el cerebro el que escribe, como dijo Max Pulver, médico y psicólogo suizo, que, a principios del siglo XX, sentó las bases de la Grafología moderna. El proceso de escribir se establece por un circuito nervioso que se inicia en el hemisferio izquierdo y que envía señales sensomotoras desde el cerebro a la mano. Cuando escribimos, el cerebro se sirve de nuestra mano para plasmar sobre el papel todo cuanto está dentro de nuestra cabeza. Revelamos los rasgos de nuestra personalidad, aptitudes, capacidades y vivencias. Incluso, lo que no conocemos de nosotros mismos...o no queremos reconocer. La letra permite conocer debilidades y fortalezas de la persona analizada. Por lo tanto, es un método infalible para asesorar sobre aspectos que influyen en nuestra manera de vivir y de afrontar una enfermedad, de reconducir una vida y hasta de pasarlo fenomenal.
Una Grafocata puede tomar formatos diferentes, desde un evento privado como una celebración o fiesta, hasta un formato empresarial, como puede ser la promoción de un producto. Pero quédate con esta idea: Todos somos maravillosos imperfectos y es en esa imperfección donde está nuestra singularidad, nuestra verdadera forma de ser que nos hace únicos e intransferibles. Y es ahí donde conectamos con nosotros mismos a través de sabores, aromas y todo el mundo de nuestros sentidos. ¿Te animas?
